Pepino
Pertenece a la familia de las cucurbitáceas, siendo la especie a describir: Cucumis sativus L. Son plantas herbáceas anuales, rastreras o trepadoras, cuyo sistema radicular es fasciculado y de desarrollo superficial. Los tallos son angulosos, híspidos y poco ramificados, con zarcillos y hojas pecioladas ovado-cordadas o suborbiculares, vellosas y de color más pálido en el envés. Las flores son unisexuales: las femeninas son solitarias, en corola de lóbulos y de color amarillo; y las masculinas, en fascículos pauciflorus. El fruto es cilíndrico u oblongo, más o menos anguloso o trígono, lampiño y tuberculado, a y veces aculeado.
Los distintos tipos de pepinos comercializables, por su tamaño y forma, son:
Pepino corto (tipo español): longitud máxima de 15 cm. y un peso medio de unos 125 g.
Pepino medio largo (tipo francés): longitud de 20-25 cm.
Pepino largo (tipo holandés o Almería): hasta 25 cm. de longitud.
Tiene un bajo aporte calórico, debido a su reducido contenido en hidratos de carbono en comparación con otras hortalizas, y a su elevado contenido de agua.
Aporta fibra, pequeñas cantidades de vitamina C, provitamina A y de vitamina E, y, en proporciones aún menores, vitaminas del grupo B tales como folatos, B1, B2 y B3. En su piel se encuentran pequeñas cantidades de beta-caroteno, pero una vez que se pela el pepino, su contenido se reduce casi a cero.
El pepino es una hortaliza de verano, pero en la actualidad se puede comprar durante todo el año gracias a los cultivos de invernadero, que han proliferado de modo extraordinario tanto en la costa sur de la península ibérica como en las islas Canarias.
– CALENDARIO DE PRODUCCIÓN: de Noviembre a Junio.